El Real Mallorca no ha tardado en reaccionar al polémico comunicado del CD Mirandés en el que el conjunto burgalés comunicaba la prohibición de símbolos mallorquinistas en toda grada que no sea la visitante.

El club bermellón defiende a sus aficionados y trabajará junto a las autoridades para que se cumplan los derechos de los espectadores:

«El RCD Mallorca quiere manifestar su rechazo al comunicado del CD Mirandés en el que se informa que solo se permitirán lucir distintivos (bufandas, camisetas, banderas u otros complementos) por parte de nuestra afición en la zona destinada a ella en Anduva.

Desde el club consideramos que el partido del domingo debe ser toda una fiesta del fútbol y no debe haber espacio para la intolerancia. Por ello, no entendemos que nuestros aficionados no puedan lucir sus camisetas o bufandas en cualquier zona, hecho que va en contra de todo fair play deportivo.

Ante todo queremos defender a nuestra afición e informaremos a las autoridades competentes para que nuestros aficionados puedan defender su colores, sea en la zona del estadio que sea.

El RCD Mallorca desea que el domingo haya un espectáculo futbolístico de primer nivel y ningún espacio para la intolerancia o la incitación a la violencia».