«La Roja» puede sellar su clasificación para el Mundial de Rusia 2018 este mismo viernes si gana a la selección de Albania en el mítico Estadio Rico Pérez de Alicante. Tras una fase de clasificación impecable en la que la selección nacional se ha impuesto a Italia en la disputa por la primera plaza, los de Julen Lopetegui se encuentran ante el último paso para clasificarse para Rusia, ya que tan sólo necesita una victoria en uno de los encuentros frente a Albania o Israel. 

La llegada de Julen Lopetegui al banquillo de la selección española el pasado mes de julio de 2016 sirvió para dar continuidad a un estilo y a un modelo de juego que durante varios años llevó a La Roja a la cúspide del panorama futbolístico internacional. 

Tras los fracasos en el Mundial de Brasil 2014 y en la Eurocopa de Francia 2016, la selección española tomó un nuevo rumbo de la mano de Julen Lopetegui y comenzó un período de remodelación dentro del vestuario con la llegada de jugadores que han alcanzado éxitos en las categorías inferiores y que van por el camino de conseguirlo en la selección absoluta.  

Tan sólo ocho jugadores que salieron campeones en el último gran logro futbolístico español, en la Eurocopa de Polonia y Ucrania 2012, continúan en la actualidad en La Roja y han formado parte de la última convocatoria del técnico: Pepe Reina, Gerard Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba, Sergio Busquets, David Silva, Andrés Iniesta y Pedro Rodríguez. A ellos se han unido jugadores de la clase de Isco, Koke, Saúl, Asensio o Morata entre otros para conseguir emular los éxitos de sus predecesores. 

El modelo de juego de la selección española sigue dando continuidad al sello que implantaron hace no tantos años los Xavi, Casillas, Puyol, Torres, Villa y compañía. Un modelo de juego basado en un juego de posición donde la velocidad de juego, la conservación de balón y el tercer hombre, entre otros, son rasgos tácticos ofensivos que se han visto complementados con la verticalidad y el juego vertiginoso que aportan jugadores habilidosos como Isco, Asensio o Koke. Una nueva cara para una España que vuelve a cautivar con su fútbol, el mismo que levantó pasiones durante muchos años. 

En la portería, David De Gea y Kepa Arrizabalaga tomaron el relevo de Iker Casillas. En la línea defensiva, a los ya mencionados Piqué, Sergio Ramos y Jordi Alba se les suman el dueño de la banda derecha del Real Madrid, Dani Carvajal, Nacho Fernández, Azpilicueta, Marc Bartra, que se ha hecho un hueco en la zaga del Borussia de Dortmund, y Monreal. En el centro del campo, donde se crea el fútbol de toque español, acompañando a Sergio Busquets, Andrés Iniesta y David Silva, han cogido el relevo de los Xavi Hernández, Xabi Alonso y compañía, unos nuevos bajitos: Isco, Asensio, KokeThiago, Saúl e Illarramendi. Calidad, ilusión y savia nueva a la sala de máquinas de La Roja. Y en la sala de ejecución, para meter todo lo que se genera en la zona media, al ya conocido Pedrito, se le suman Álvaro Morata (indiscutible en el Chelsea), Rodrigo (temporadón en el Valencia), Iago Aspas (motor del Celta) y Callejón (imprescindible en el Nápoles). 

 No cambiará mucho de esta lista de 23 la lista definitiva para el Mundial de Rusia 2018, donde España buscará resarcirse de su estrepitoso fracaso en Brasil, y buscará callar a todos aquellos que pusieron en duda el futuro de La Roja, intentando volver a alzarse en lo más alto del fútbol mundial y recuperar así su número 1 en el Ranking FIFA tras perderlo en estos últimos seis años donde los éxitos no fueron de la mano de nuestra selección.