El Real Mallorca avanza con paso firme en la categoría de bronce del fútbol español. El actual líder de la categoría ya ha obtenido un colchón de ocho puntos respecto al segundo clasificado y esto se debe al grupo compacto formado por Vicente Moreno.
Por primera vez en muchos años, el conjunto bermellón tiene un once bien definido, con un esquema y estilo de juego conocido al dedillo por parte de los futbolistas. Además, la plantilla del Real Mallorca presenta una columna vertebral magnífica.
En primer lugar, encontramos a Manolo Reina bajo los palos. El portero malagueño llegó a la isla como uno de los fichajes del verano y en tan sólo dos meses se ha convertido en verdadero ídolo de la afición. Reina es un líder en el vestuario, tanto dentro como fuera del campo. El cancerbero bermellón se caracteriza por sus grandes reflejos y sus dotes de mando sobre la línea defensiva.
Respecto a la zona defensiva, Antonio Raíllo es el auténtico mariscal de la zaga mallorquinista. Tras empezar la pretemporada con dudas por su mala relación con la afición, el cordobés renovó hasta 2021 y solucionó sus problemas con la grada. Raíllo es vital en el esquema de Moreno y una de sus principales virtudes es la salida de balón y el juego aéreo, donde gana prácticamente todos los balones.
En cuanto a la medular, Lago Júnior es quizá el futbolista más diferencial del Mallorca. El costamarfileño destaca por su velocidad y cambios de ritmo vertiginosos que provocan más de un dolor de cabeza a los laterales contrarios.
Finalmente, el ataque bermellón lo preside Abdón Prats. El delantero de Artá se ha convertido en el nueve de referencia del equipo, marcando siete goles en lo que va de campaña. Es un futbolista luchador y guerrero, que aporta un trabajo increíble y que se complementa a la maravilla con su socio Álex López, formando una de las mejores duplas de Segunda B.
En definitiva, estos cuatro futbolistas aportan calidad y experiencia al servicio de un equipo llamado a ser referente en la categoría.