Si parecía que el fichaje de Marco Borrielo era la bomba que sacudiría el mercado de Segunda División B, la posible llegada de Antonio Cassano a la isla pitiusa está dejando boquiabierto a propios y desconocidos. El jugador, conocido por su carácter volcánico pero también por el arte que tiene en sus botas, podría aterrizar en Ibiza en los próximos días.
Según el Corriere della Sera el Ibiza ha puesto el punto de mira en el veterano ariete italiano. El jugador de 36 años llegó a vestir la camiseta del Real Madrid, ha defendido los colores de la selección italiana y el año pasado se quedó sin equipo tras rescindir contrato con el Hellas Verona.
De jugar en Bari hasta vestir de blanco
El jugador nacido en Bari empezó su andadura por el fútbol profesional en el equipo de su ciudad natal, en la Serie A. Su gran calidad con el balón y su olfato de cara portería hicieron que la Roma acabara incorporando al ariete, que estuvo en la Ciudad Eterna un total de cinco temporadas rindiendo a buen rendimiento.
La difícil situación económica que atravesaba la Roma en la temporada 2006/07 obligó al club a desprenderse de jugadores importantes, y el Real Madrid lo acabó comprando por 5’5 millones de euros.
Pese a que ganó una Liga vistiendo de blanco, Cassano no tuvo el protagonismo esperado en el Bernabéu, y tras dos temporadas abandonó la capital de España. El italiano pasó siete meses de vacaciones tras acabar fichando por la Sampdoria. En Génova, Cassano llegó a estar un total de cuatro campañas y logrando unos números más que notables.
En su último año en la Sampdoria el italiano no pudo evitar el descenso del equipo, y entonces el Milán de Massimiliano Allegri decidió incorporarlo en sus filas.
Milán, Inter, Parma, y de vuelta a la Sampdoria
En la capital lombarda el delantero fue titular en la mayoría de partidos, pero no estuvo muy acertado de cara a portería, con tres y siete goles en dos temporadas. Unas dolencias cardíacas lastraron su última temporada de rossonero, y el propio jugador pidió abandonar el club para vestir la camiseta de su máximo rival, el Inter de Milán.
El presidente del club por aquel entonces, Massimo Moratti, calificó al jugador de “Divertido e interesante”, y al ser preguntado por la problemática personalidad del jugador, el mandatario aseguró que “no le pondremos firme, tiene la personalidad suficiente para hacerlo él mismo”.
En el Inter el jugador dejó muy buena imagen sobre el terreno de juego, llegando a participar en 28 encuentros y viendo portería hasta en siete ocasiones.
Parma fue su siguiente parada, y pese a cuajar una gran primera temporada su segundo año como ducali fue decepcionante, y el equipo acabó descendiendo.
El Mambino decidió desvincularse del club, y decidió regresar a la Sampdoria. Su aventura acabó en tragedia, ya que fue apartado del club por indisciplina y vivió los últimos meses de la temporada 2016/17 en el ostracismo.
El jugador cuelga las botas… o eso parecía
Su último equipo hasta el momento fue el Hellas Verona, conjunto el cual Cassano no llegó ni a debutar. El italiano alegó no poder soportar el estrés de la preparación de la temporada, y finalmente entidad y jugador rescindieron contrato. El italiano informó de que colgaría las botas, pero, visto lo visto, no será así. Amadeo Salvo está convenciendo al jugador de que defienda los colores del Ibiza.
Aún no hay ninguna oferta formal sobre la mesa, pero la directiva pitiusa ya está engrasando la máquina para intentar que el jugador que fue internacional con su país defienda los colores de la UD Ibiza. De llegarse a producir, la plantilla del Ibiza tendría argumentos más que suficientes para luchar por la promoción de ascenso a la Liga 1|2|3.
