La UD Ibiza vuelve a tener los pies en el suelo. Tras el torrente de ilusión que conllevó la primera victoria de la temporada y el fichaje de Marco Borriello, la inesperada derrota en casa ante el Atlético Sanluqueño ha hecho rebajar la euforia incontenida, provocando que la cautela regresase a la isla pitiusa.

Autocrítica y reflexión

La UD Ibiza llevó durante toda la segunda parte el peso del partido, y gozó de innumerables ocasiones de gol. La suerte no se alió con los pitiusos, que acabaron sucumbiendo ante la única ocasión de gol que tuvo el equipo andaluz a lo largo de la segunda mitad. La derrota ha hecho mella en el equipo, pero ya se piensa en revertir la situación en el próximo partido.

Fotografía de la UD Ibiza

El técnico del equipo, Antonio Méndez, analizó justo como se había desarrollado el partido. «El equipo ha mejorado tras el descanso. Cuando hemos encontrado espacios hemos tenido mucho más dominio«, aseguraba el técnico en la rueda de prensa posterior a la derrota.

«A raíz de la expulsión sabíamos que nos tendrían que sorprender mucho para que nos marcasen, y su gol ha sido un palo importante. Muchas veces el equipo crece con resultados, y en la cabeza de ellos esta derrota es un paso atrás«, lamentaba Méndez. «Hemos tenido muchas ocasiones de gol, nos falta continuidad en el juego, pero tenemos mucho margen para mejorar«, aseguraba el míster del equipo balear.

El jugador Gonzalo también hacia autocrítica sobre la derrota ante los andaluces, y aseguraba que «hemos generado ocasiones para llevarnos algo mejor, pero un despiste nos ha penalizado«.

La UD Ibiza empezó a entrenar este lunes, y ya tiene la mente puesta en el próximo rival, el C.F. Villanovense. Toca resarcirse y volver a creer en el ambicioso proyecto de Amadeo Salvo.