Cuando se gana, la semana es mucho más tranquila y la espera para volver al césped se hace amena. Es lo que le está pasando al Atlético Baleares estos días. Tras la victoria ante la UD Sanse (3-2), los blanquiazules trabajan con optimismo su próximo reto: el Pontevedra. Toni Gabarre, que ya se estrenó como goleador en el último partido, asegura estar muy contento por haber marcado y, sobre todo, por el buen inicio que está cuajando el equipo: «Cuando llegué tenía expectativas altas, de tener buen equipo, empezar bien la liga y estar arriba y así ha sido». «Estoy feliz de que el míster confíe en mí y poco a poco le estoy devolviendo la confianza con trabajo. Pero Arturo y Cervero están allí. Son dos grandes delanteros y cualquiera puede hacerlo perfecto«, explica.
Gabarre asegura que en el Grupo I hay mucha calidad, por lo que será una temporada muy complicada: «Hay filiales, equipos buenos que te hacen gol hasta con un jugador menos y cada partido es una batalla y nos tenemos que adaptar». A nivel personal indica que su misión es la de marcar goles, pero su tarea defensiva también es muy importante: «El delantero tiene un papel de meter goles pero somos los primeros en iniciar la presión y defender, pero como todo delantero tengo que meter goles, es lo que nos da de comer». «Estaba tranquilo, no me ansia estar dos o tres partidos sin marcar si el equipo gana. Eso sí, con el gol del otro día me he quitado un peso de encima», reconoce el delantero blanquiazul. Por último, explica que en el Estadi Balear la consigna de juego es distinta y espera una consolidación al respecto: «En casa bajamos la pelota, combinamos bien, tenemos jugadores de mucha calidad arriba y podemos hacer buenos partidos en ritmo, tocar y hacer goles».
