Primera comparecencia previa tras la vuelta al profesionalismo. Ante la duda inicial de tantos, vuelve a sentarse el mismo. Vicente Moreno, artífice del meteórico ascenso de la pasada temporada, afirma lo evidente, desde la humildad que profesa: «sería un buen inicio si ganamos. Se dan unos condicionantes y circunstancias muy bonitas para ganarlo», decía hablando de regresar a Son Moix, de un gran rival y de la vuelta a la LFP. Aboga por seguir en la misma línea del año pasado, aunque asegura que tendrán que «trabajar más que el resto«, pese a no sentirse inferior a ninguno de sus 21 competidores.
«Llevamos seis semanas preparando la temporada, pero también este partido ante Osasuna. Pese a haber cambiado de entrenador, han dado continuidad a la plantilla y además se han reforzado en algunas parcelas», decía el técnico en su análisis del rival, el que asegura que «tiene pocos defectos, pero los intentaremos explotar».
«Somos el Mallorca, sí, pero aún así somos recién ascendidos».
Ante la confección del once, debate por excelencia en la localidad palmesana, asegura «tenerlo claro, con algunas dudas debido a circunstancias». Esas circunstancias son la sanción de Stoichkov que acarrea desde la pasada temporada y las dolencias de Sastre y Dani Rodríguez, a los cuales no descarta aún: «No descarto a nadie. Soy creyente, creo en los milagros, y mañana aún tenemos un entrenamiento».
Para finalizar, trató el otro gran debate que colma bares y provoca perdidas capilares en estos días de clima cambiante: la llegada de un cuarto central. «Solo tenemos tres centrales y es obvio que queremos doblar las posiciones, pero no depende de mi, ni si viene alguién ni quien venga». Desde que Giuanluca Di Marzio, periodista de Sky Sports Italia y gurú internacional de fichajes, hablase del interés del club por Martin Valjent, joven jugador del Chievo Verona e internacional eslovaco, no queda ni un solo foco que no le apunte a él. Vicente, no obstante, prefiere «no hablar de hipótesis» y preocuparse de los que sí están. Pendiente de alguna entrada y otras salidas, la plantilla queda suficientemente amplia, aunque asegura no importarle: «no tengo problema, pero nos lo pone más complicado para gestionar el grupo. Lo haremos tomando las mejores decisiones para el equipo».
