No es un día cualquiera. Este jueves Manolo Reina y Salva Sevilla se han despedido del RCD Mallorca. Dos jugadores que llegaron en Segunda División B y que se marchan con la etiqueta de leyendas. Y es que tanto uno como otro lo han dado por el escudo bermellón durante las últimas cinco temporadas. Tres ascensos y una agónica permanencia en Primera División. Siendo piezas importantes con Vicente Moreno, Luis García Plaza y Javier Aguirre. Parando balones imposibles en el Sánchez Pizjuán. Marcando goles para seguir soñando. En definitiva, una de esas despedidas de las que duelen.
Reina y Sevilla han llorado nada más ponerse a hablar. El primero en pasar fue el guardameta: «Nos vamos de un sitio donde, desde el primer día, nos acogieron muy bien. Espero haber estado a la altura de este club. Aquí tenéis un mallorquinista de por vida». Después, Salva: «He sido muy feliz estos cinco años. Me voy con la satisfacción de dejar el club donde se merece, en Primera». Pero el ya nuevo jugador del Alavés quería más. Ya había ‘calentado’ las redes sociales tras una entrevista en Fibwi4, y en el acto lo ha vuelto a hacer sin tapujos: “Me voy decepcionado; no por no renovar, sino porque pienso que las cosas se podrían haber hecho de otra manera. Siempre soy muy positivo y me quiero quedar con las cosas buenas. Lo que me habéis dado supera cualquier cosa negativa. Hay cosas que no se compran con dinero». «Por un parte me voy decepcionado y dolido con los señores Pablo Ortells y Alfonso Díaz, las dos únicas personas que me lo han hecho pasar mal y no me lo voy a esconder», apuntaba en Fibwi4.
Viendo la despedida de Reina y Salva. pic.twitter.com/1idlWRG2tD
— FutbolMallorca (@FutbolMallorca) June 9, 2022
Una declaración de intenciones ante Pablo Ortells, Alfonso Díaz, jugadores del club (solo han estado en el acto Dani Rodríguez, Brian Oliván, Abdón Prats y Leo Román) y un centenar de aficionados. Un broche final un tanto agridulce, ya que la posibilidad de seguir viendo a Salva Sevilla de bermellón parecía una posibilidad. En el fútbol, como en la vida, todo son etapas. El Mallorca de Segunda B que reenganchó a mucha gente ya es más un recuerdo del pasado que una vida presente: en la plantilla actual solo quedan Lago Junior y Antonio Raíllo.
