Javier Aguirre ha analizado la situación del Real Mallorca antes de recibir al Valencia. Tras enlazar dos empates seguidos (primero ante el Barça, luego contra el Rayo), el claro objetivo ahora es sumar una nueva victoria. Los bermellones únicamente han sido capaces de ganar al Celta, en Balaídos; es más, aún no sabe qué es lograr el triunfo en Son Moix. El técnico mexicano habla sobre lo importante que sería sumar de tres antes del parón, así como del crecimiento de Antonio Sánchez.
Sumar de tres después de dos empates.«Viene un parón en el que no hay jornada en el que te ves en la clasificación más apurado o tranquilo. Por diferentes factores, también por el último resultado que nos dejó un poco cara de disgusto por la situación por la que se da el empate, ante el Valencia tenemos que intentar hacer buenos los empates. Que se vea un equipo con la intención de ganar».
Mejora del equipo ante Barcelona y Rayo Vallecano. «Como persona de fútbol nunca dejas de aprender. Nos llevamos una lección de Girona, y yo entoné el mea culpa. A partir de ahí hemos trabajado, mirado vídeos y a pensar en qué posición rinden más los jugadores, o el sistema de juego. Todos estamos con esa incertidumbre. Sobre todo, intentar aprovechar las vulnerabilidades del rival».
Cómo está quedando Son Moix, amigos.
— FutbolMallorca (@FutbolMallorca) October 5, 2023
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Javier Aguirre lo tiene claro con Antonio Sánchez
El Valencia de Rubén Baraja. «Tienen bajas importantes. Es un equipo que cogió Baraja en la última temporada, que apostó por los jóvenes y le fue muy bien. Son un equipo dinámico, intenso. Son rápidos, atrevidos… Hugo Duro está pasando un buen momento y Javi Guerra es material de exportación, espero que no se vaya a Arabia como Gabri Veiga. Tienen bajas en defensa, tenemos dudas de a quién pondrán. Será un partido bonito, dinámico y disputado, y ojalá se quede en casa».
Antonio Sánchez y diez más, lo confirma el propio Javier Aguirre.«Hay jugadores que necesitan ciertas palabras. Antonio es un jugador muy sensible, especial. No esconde sus sentimientos, es frontal. Cuando hablé con él este verano fue fantástico, le pedí que se quitara el diez de la espalda porque era mucha responsabilidad. Que se liberará y se divierta, entre otras muchas cosas. Desde esto empezó de cero le dije que, si quería quedar que se quedara, que no me estorbaba. Se puso 18, empezó a entrenar y parece que me lo han cambiado, es otro».
