El RCD Mallorca vuelve a ganar (2-1) en Son Moix, donde no lo hacía desde hace dos meses, después de doblegar al colista, al Real Valladolid, en un encuentro en el que tuvo que remontar y contar con un Dominik Greif espectacular para sumar los tres puntos. Jagoba Arrasate abandonó la línea de cinco en defensas para formar con un 4-2-3-1 con Vedat Muriqi en punta y la vuelta de Takuma Asano como grandes novedades. El Pucela, por su parte, ya descendido y sin presión aprovechó para dar minutos a menos habituales y canteranos.
El equipo bermellón vio como el Valladolid salió mejor al campo y los primeros veinte minutos fueron un monólogo del conjunto blanquivioleta. El Mallorca se mostraba endeble y le hacían daño desde los costados, por dentro y a balón parado. Tanto era así que se adelantaron pronto los visitantes con una gran jugada de Raúl Moro que acabó con este regalándole el gol a Chuki e inquietando a un Son Moix que respondió con algún que otro pito. Los minutos posteriores no auguraban nada bueno, pues el Valladolid siguió apretando y pudo ampliar la distancia en el marcador. Un gran Greif mantuvo al Mallorca vivo y poco a poco logró hacerse con el dominio del encuentro. Con muy poquito empezaron a generar peligro los locales y encontraron el premio con un centro pasado de Pablo Maffeo que recogió Omar Mascarell para igualar la contienda. Se calmaron las aguas hasta el descanso con la sensación de que con un paso más adelante el Mallorca podía hacer otro
Spoiler: Era su primer gol con el Mallorca ???? pic.twitter.com/tUH55amMo1
— RCD Mallorca (@RCD_Mallorca) May 10, 2025
El Mallorca logró remontar
A la vuelta de vestuarios, sin cambios en ningún equipo, el Mallorca esta vez sí salió al verde decidido a llevarse el encuentro. Asano, muy profundo, recibió en banda, se giró y se la entregó a un Sergi Darder entrando desde segunda línea, el de Artà orientó y aun desequilibrado sacó un gran golpeo que puso el 2-1 en el marcador y alivió a un Son Moix inquieto. Siguió dominando el equipo de Arrasate durante los siguientes minutos, pero poco a poco y con los cambios introducidos por el Valladolid, éstos iban ganando metros y embotellando al Mallorca, que terminó con un once tremendamente defensivo. El Valladolid tuvo el empate en varias acciones, incluso vio como le anulaban un gol a la salida de un córner por un ligerísimo fuera de juego de Raúl Moro. Una buena defensa del área, aun con algún que otro susto y una parada salvadora de Greif, fue suficiente para certificar la victoria y devolverle la moral a un equipo que ciñéndose a la clasificación puede mirar a Europa, pero que tiene que mejorar mucho para aprovechar sus opciones en las últimas jornadas. Lo próximo, el miércoles en el Santiago Bernabéu ante un Real Madrid que querrá mantener sus opciones de pelear por LaLiga.
