Injusto, mala suerte, falta de acierto, arbitraje nefasto; ya nada
consuela a los aficionados bermellones que presenciaron en directo el
encuentro entre el Real Mallorca y la Ponferradina. Tras otro jarro de
agua fría, las caras de resignación, eran evidentes entre la parroquia
local, que ven como un equipo con la etiqueta de favorito para el
ascenso, no consigue levantar el vuelo.

 

 

Tras dos jornadas sin
ganar se esperaba un Mallorca con hambre de victoria y con ganas de
acallar las críticas sobre su juego, pero de nuevo sucedió todo lo
contrario. El equipo dirigido por José Luis Oltra mostró dos caras bien
diferentes. En la primera parte se mostró seguro y salió decidido a ir a
por el partido y así en el minuto cinco llegaba el primer gol de Alfaro
( primer gol de la temporada para el delantero) . Poco después
empataría la Ponferradina en la primera jugada de peligro de la que
dispuso. El Real Mallorca no se arrugo y fue a por el segundo tanto que
sería anotado por Víctor Casadesús. El equipo bermellón tuvo ocasiones
para lograr el 3-1 en la primera parte, pero de nuevo la falta de
acierto mando a los jugadores al vestuario con un inquietante 2-1.

 

La
segunda parte fue otra historia, el Mallorca solo apretó quince
minutos,tras los cuales se fue diluyendo a medida que pasaban los
segundos. En la grada los nervios aumentaban al ver como la Ponferradina
insistía buscando el empate, y así en el minuto 85, gracias a un
inocente penalti, subía al marcador el definitivo 2-2.

 

El Real
Mallorca intento con más corazón que cabeza conseguir el gol de la
victoria y apunto estuvo de conseguirlo en el tiempo de descuento, pero
la mala suerte impidió que el balón entrara en la portería de la
Ponferradina.

Tras esta jornada el equipo
mallorquín sigue estando en tierra de nadie en la clasificación, a 2
puntos de los puestos de playoof y a 5 puntos de los puestos de ascenso
directo. También se mantiene igual que la jornada anterior a 4 puntos de
la zona de descenso.

Se  avecina una semana
con mucha tensión en el seno del club bermellón, ya que disputados trece
partidos, el equipo no convence a nadie y menos a una afición que
empieza a desconfiar cada vez más de la plantilla.

Si
todo lo que esta pasando no fuera suficiente, el domingo nos espera un
encuentro de gran dificultad frente al Deportivo de la Coruña. Todo lo
que no sea una victoria frente a los gallegos, podría ver peligrar la
continuidad de Oltra como técnico bermellón.