El RCD Mallorca afronta este sábado 16 de agosto, uno de los duelos más exigentes del calendario, la visita del de todo un Barça. El encuentro, que se disputará a las 19:30 h en Son Moix, servirá de test para saber cual es el máximo de este equipo y saber de lo que es capaz de hacer.

El técnico mallorquínista es el máximo conocedor de la dificultad del reto y ha sido claro en la rueda de prensa: “Para competir contra el Barça tenemos que acercarnos a la excelencia”. Minimizar los errores y tapar cualquier espacio libre en defensa es clave para, como mínimo, puntuar.

El FC Barcelona concluyó su pretemporada con pleno de victorias y un rendimiento que ilusiona al entorno culé. Bajo la batuta de Hansi Flick. El broche de oro llegó con un contundente 5-0 ante el Como en el Trofeo Joan Gamper, donde brillaron reafirmando el estilo ofensivo y agresivo que pretende seguir imponiendo Flick.

 

Bajas sensibles para el Mallorca

El conjunto bermellón llega con bajas sensibles. Samu Costa está descartado por lesión en la rodilla, mientras que Pablo Maffeo y Cyle Larin no entran en la convocatoria por sus probables salidas. En el lado positivo, el partido servirá para ver el debut de Pablo Torre, que tendrá la oportunidad de medirse a su ex equipo en un estreno difícil.

Todo apunta a que Arrasate apostará por un once sólido, en el que Leo Román será titular tras la salida de Dominik Greiff. También se espera el estreno del nuevo fichaje, Mateo Joseph. El técnico de Berriatúa no ha descartado colocarlo en la banda.

El plan mallorquinista parece claro, un bloque compacto, defensa intensa y velocidad a la contra, aprovechando la defensa alta de los culés. Con jugadores rápidos a la contra, y el olfato de Muriqi en el área, el equipo buscará castigar cualquier despiste de la zaga blaugrana.

Las estadísticas históricas no favorecen al Mallorca, que ha ganado solo 17 de los 75 enfrentamientos ligueros entre ambos clubes. Sin embargo, Son Moix se ha convertido en un estadio incómodo para los grandes. El Mallorca siempre es un rival difícil de batir en su feudo y mañana Son Moix será un infierno.