La incorporación del mediapunta se ha hecho oficial este lunes, tras varias semanas de contactos entre el Real Mallorca y el FC Barcelona. El club bermellón se hace con la propiedad del jugador tras pagar una cifra alrededor de los cinco millones y conceder un 50% al Barça en caso de futura venta. Firma hasta 2029, con una cláusula de rescisión estimada en veinticinco millones de euros.


“Estoy muy contento de estar aquí”, ha declarado el nuevo jugador mallorquinista en su llegada a la isla. Un refuerzo de garantías para Jagoba Arrasate que llega para aportar calidad al centro del campo del conjunto de Son Moix. Este martes conocerá a sus compañeros en su primer entrenamiento en Son Bibiloni.

El mediapunta llega al Real Mallorca tras tres temporadas en el conjunto culé. La fuerte competencia con compañeros como Pablo Gavi o Pedri, ha impedido que disfrutara de los minutos esperados. Torre llegó a Barcelona tras ascender a Segunda División con el Racing de Santander en la temporada 2021/2022, donde marcó diez goles y repartió ocho asistencias con tan solo 18 años.

«Quiero hacer disfrutar a la afición del Mallorca», afirma Torre ante los medios del club. El Mallorca busca conseguir la mejor versión del ex culé a sabiendas del gran nivel que puede alcanzar el joven atacante. 

Pablo Torre posando con la elástica mallorquinista (Foto: RCD Mallorca en X)

Una historia que empezó en Arabia

La única buena noticia de esa triste semifinal de Supercopa en Arabia – tanto por el resultado como por los incidentes sucedidos al final del partido con hinchas locales – fue el inicio de contactos entre Pablo Ortells y la directiva del FC Barcelona para el fichaje de Pablo Torre

Sin embargo, no ha sido hasta este verano cuando las negociaciones se han intensificado. Hasta el punto de que Pablo Ortells viajó a Eslovaquia para ver un partido del Europeo que disputaba el cántabro con la Sub-21.

El Mallorca cierra su primera incorporación en un verano que se espera agitado, donde el mallorquinismo quiere volver a ilusionarse tras el mal final de temporada.