Cuando llega el tramo final… Sergi Darder coge el timón de la situación. La pasada temporada, el centrocampista mallorquín dio un paso al frente para amarrar la permanencia con goles importantes en Pamplona o en Son Moix contra el Almería. Con Javier Aguirre nunca pudo mostrar todo su fútbol por estar en una posición poco favorable para él; misma situación que se encuentra con Jagoba Arrasate en momentos determinados. Estando en la banda izquierda, Darder pierde facultades creativas; cuando está en el centro del campo o de mediapunta… la cosa cambia de manera radical. Sin embargo, cuando el equipo lo necesita, él está. Da igual su situación en el campo. Y este pasado domingo lo volvió a demostrar: asistió a Cyle Larin para estrenar el marcador y anotó el definitivo 0-2 ante la Real Sociedad. A falta de siete jornadas para finalizar la temporada, el de Artà suma las mismas asistencias (cinco) que durante todo el curso pasado.

«Creo, como he dicho siempre, que los números parecen más de lo que haces. Creo que esta temporada me he encontrado muy cómodo, agradecido por la confianza que el míster me ha dado desde el primer día. Números en cuando a asistencias y goles no acabamos de llegar, es verdad que ahora parece que ‘Sergi es mejor porque hace más goles o más asistencias’ y no es así. Creo que en general tengo que crecer, delante del nivel de la temporada creo que he estado a menos que más. Contento, porque evidentemente el gol sirve para sumar tres puntos, pero sobre todo por el trabajo defensivo: hoy hemos estado muy implicados y en ese sentido le tenemos que dar la enhorabuena a todos», contaba él mismo tras terminar el partido en el Reale Arena. «Tenemos un partido en casa, en Son Moix, en el que no podemos perder, no podemos perdonar más«, añadía.

 
 
 
 
 
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Sergi Darder y su paso adelante

El ‘mago de Artà’ aparece de nuevo, y con él, las aspiraciones europeas del Mallorca. A falta de siete jornadas para finalizar la temporada, los bermellones se encuentran octavos con 43 puntos. Una tesitura que deja la permanencia definitivamente amarrada y que permite soñar por todo lo alto al aficionado mallorquinista. Si bien lo visto ante el Celta en Son Moix fue una tremenda decepción, vencer 0-2 a la Real en Anoeta es una clara declaración de intenciones. Más aún, viendo que el resto de rivales (el propio Celta, la misma Real Sociedad, Rayo Vallecano o Getafe) fueron incapaces de ganar sus respectivos partidos.

En un contexto donde el drama y el nerviosismo podían hacer acto de presencia en el vestuario, la serenidad de Darder da paz. Ni la derrota ante el Celta fue tan catastrófica ni la victoria de este domingo asegura un puesto europeo. Lo visto ayer sí demuestra que el equipo de Arrasate se antepone ante las adversidades. Porque era ‘fácil’ tirar la toalla tras el duro golpe en Son Moix; y teniendo las sensibles bajas de Vedat Muriqi, Takuma Asano o Robert Navarro. Pero los jugadores dijeron que no, que entre todos podían dar de nuevo esperanzas a una afición que terminó resignada en el último partido en Son Moix.

Ya son cinco las asistencias que suma Darder en Liga. Y son cuatro (Real Sociedad, Celta, Espanyol y Athletic) en los últimos cinco partidos. Un dato que corrobora su paso adelante cuando más se le necesitaba. Si bien verle tirado a banda no es plato de buen gusto para el aficionado bermellón, todo cambia cuando juega por dentro. En el Reale Arena tuvimos de todo: en el 0-1, Darder estaba por dentro; en el 0-2, es él mismo quien empieza por la izquierda para terminar marcando. En definitiva, si el de Artà está de dulce el rumbo del Mallorca cambia.

Sergi Darder, en el Trofeu Ciutat de Palma
Foto: FutbolMallorca